Mostrando entradas con la etiqueta Mallorca. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Mallorca. Mostrar todas las entradas

martes, 6 de septiembre de 2011

Mallorca. Cuevas del Drach y Cuevas del Hams

Para nuestro último día en la isla de Mallorca lucio de nuevo el sol. Hizo un precioso día templado, de invierno.

La excursión fue para conocer uno de los lugares mas visitados de la isla: las Cuevas del Drach, en Porto Cristo, muy cerca de Manacor.

El bus en donde habíamos salido, como todos los días a las 9 de la mañana, enfilo hacia el centro de la isla, pero al llegar a Inca, donde no paramos, doblo y se dirigió hacia la derecha, a la parte este de Mallorca.

La primera parada consistió en una visita a una gran tienda, mas bien joyería, donde se vendían muchas piezas con perlas Majorica.

Esta clase de perlas artificiales, es una creación mallorquina, cuyo nombre reflejan.

Las famosas perlas, conocidas en todo el mundo, son el resultado de horas de investigación, y de artesanía, con los cuales se crea una perla perfecta.

Es un proceso similar a lo que ocurre en la naturaleza con la ostra. El proceso empieza en el núcleo interior, que se recubre capa a capa con una esencia que se obtiene de productos marinos, y que da a la perla su color y su iridiscencia. Con esto se consigue una perla perfecta, cosa que no sucede en los procesos naturales.

La formula para conseguir las perlas es un secreto bien guardado.

La primera fábrica de estas perlas fue fundada en 1.897, en Manacor, por el industrial alemán Eduard F. H. Heusch. La empresa fue continuada por su hijo Eduardo C. Heusch, después de su fallecimiento en 1.939, pero fue en 1.951 cuando se comercializaron perlas con el nombre de Majorica.

Hoy día sigue siendo una gran empresa con mas de 700 empleados, que vende en todo el mundo, incluidas las lineas aéreas y la tiendas de los aeropuertos.

El proceso de fabricación nos fue explicado, pero no mostrado.

A pesar de lo tentadora que era la oferta, con muchos modelos y engarces de las perlas, resistí la tentación y me conforme con contemplarlas. Supongo que algunos compañeros se llevaron diversos recuerdos de perlas, que la verdad es que son preciosas.

Mientras ellos compraban pasamos a una inmensa tienda adyacente, con toda clase de objetos, donde estuvimos mas tiempo del necesario.

Continuamos hasta Porto Cristo.

Este precioso, conocido y turístico pueblo, es muy utilizado por los propietarios de yates, que aprecian su protegido puerto natural.

Su nombre es antiguo. En 1.260 los tripulantes de un barco que sufrieron una fuerte tormenta en alta mar, prometieron depositar las imagenes de Cristo y de la Virgen, si llegaban a puerto. Finalmente llegaron sanos y salvos a la bahía de Porto Cristo, donde cumplieron su promesa.

El nombre viene del latín porto de portare, y Cristo (llevar a Cristo), en referencia a la imagen llevada a Manacor, que era el único lugar habitado por entonces.

Durante las décadas de los 60 y los 80 del siglo pasado, se produjeron en la zona sendos booms turísticos, con crecimiento de la población y del comercio, consolidándose como núcleo urbano e importante destino turístico, tanto nacional como europeo.

Muy cerca del núcleo urbano están las Cuevas del Drach y las Cuevas del Hams, que nos proponíamos conocer, además de otros lugares de interés como la Torre de los Halcones, torre de vigilancia de la costa del s. XVI, e incluso los restos arqueológicos de una basílica paleo cristiana .

Por de pronto quedamos un buen rato en el centro del pueblo, enfrente de la bahía y de la playa, que en esta época invernal, se podían apreciar sin usuarios.

El paisaje es precioso. Hay algunas mansiones alrededor de la bahía, que tiene acantilados rodeándola, que no desentonan con el entorno.

Fuimos paseando, hasta descubrir, sin saber antes que estaban allí, los restos de la basílica paleo cristiana, que se entreveían debajo de un grueso cristal, y que no parecían demasiado cuidados.

El mar estaba en calma, y eso contribuía a la belleza y paz del lugar.

Seguimos hacia las Cuevas del Drach, (o del Dragón).

Estas cuevas son uno de los lugares mas visitados de la isla, y con razón pues son verdaderamente espectaculares. He visto varias cuevas, algunas muy grandes, por el mundo, pero creo que puedo decir sin equivocarme que estas son las mas bellas y variadas, que he conocido. Las estalactitas y estalagmitas tienen formas a cual mas atractiva, extraordinariamente variadas. En algunos techos, las estalactitas lo cubren por completo como finas agujas.

Contemplándolas se ve el origen de la inspiración del famoso artista mallorquín Miquel Barceló, que ha hecho, incluso, una cúpula, reproduciéndolas.



La primera mención de la cueva es de 1.338, en que aparece citada en Manacor.

Fue incluida en el mapa de Mallorca por el Cardenal Despuig, erudito y coleccionista, que ya he mencionado, por su colección de escultura antigua, hoy día en el castillo de Bellver, en 1.784.

Pero no fue hasta 1.896, cuando Eduardo Martel, por encargo del archiduque Luis Salvador de Hasburgo- Lorena, residente en Mallorca durante diez años y gran amante de la isla, descubrió la totalidad de las salas de la cueva, y el gran lago subterráneo, bautizado actualmente como Lago Martel en su honor, considerado uno de los mayores lagos subterráneos del mundo.

El conjunto esta formado por cuatro grandes cuevas conectadas entre si, que se formaron por la acción de la entrada del agua del mar en las oquedades.

En 1.936 el ingeniero Buigas culmino el proyecto de iluminación de la cueva.

La duración de la visita, de los aproximadamente 1.200 m que se recorren, es de algo mas de una hora.

Varias vistas de las Cuevas del Drach



He oído y leído ciertas criticas sobre el planteamiento de la visita; que si se hace un paseo demasiado rápido, que si no hay carteles que expliquen lo que se va viendo, que podrían estimular el deseo de conocer mejor las cuevas, de querer saber su origen, así como el porqué de las formaciones de estalactitas y estalagmitas; de donde vienen los colores que tiñen estas formaciones y otras muchas reclamaciones.

Comprendo que para el que tenga este tipo de interés mas especifico, se le haga corto e incluso pobre, las someras explicaciones de los guías y que la visita le sepa a poco.

Pero yo soy profana en geología y la cueva me gusto muchísimo, tanto por su compleja y estudiada iluminación, que pone de relieve las extraordinarias formaciones, como por el maravilloso lago subterraneo y el breve pero emocionante concierto que se ofrece a la orilla del lago, y que, efectivamente, sabe a poco.

El concierto se ofrece desde el año 1.935 y consta de cuatro piezas de música clásica:

  1. Alborada gallega del maestro Caballero
  2. Plaisir D´Amour, de Martini
  3. Tristesse, Estudio nº 3, op. 10 de Chopin
  4. Barcarola de los Cuentos de Hoffmann, de Offenbach
Estas piezas son interpretadas por un conjunto de cuatro músicos que se desplazan en un barca por las tranquilas aguas del lago, mientras en las paredes se suceden diversas figuras, hechas con luces, que tienen relación con la música.

Despues del concierto se sube en una barca y se navega por el lago hasta la salida.

Salimos de las Cuevas del Drach, como quien ha podido ver un gran espectáculo, como quien ha podido contemplar alguna de las mas sorprendentes maravillas de la naturaleza.

Para la comida nos llevaron a un restaurante cerca de una de las torres defensivas de esta costa, que sufrió grandemente las terribles incursiones y asaltos de los piratas.

La Torre del Serral dels Falcons es una torre de vigilancia y defensa, construida en 1.577, que forma parte de la red de torres costeras que avisaban de la llegada de los piratas, principalmente berberiscos, a la costa.

El lugar, muy cercano al mar tiene un entorno precioso, con acantilados y la costa recortandose entre el mar y el cielo.

En ese barrio vive una de nuestras glorias nacionales: el tenista Rafael Nadal, número uno del mundo durante varios años, del cual nos sentimos orgullosos toda España y todos los españoles.
En la zona está el chalet donde vive, oculto de las miradas indiscretas, donde se reposa de su exitosa y exigente carrera.

Después de la comida y de un breve paseo hasta la Torre, fuimos a visitar las Cuevas del Hams (Cuevas del Anzuelo).

Las Cuevas del Hams están muy cerca de Porto Cristo. Fueron descubiertas en marzo de 1.905 por el espeleólogo Pedro Caldentey, mientras buscaba ónix, roca muy abundante en la zona.

Caldentey se puede considerar un precursor del turismo, pues reconoció el interés que su descubrimiento iba a tener para los futuros visitantes de Mallorca y preparo las cuevas para el público, mejorando los accesos y trazando itinerarios en ellas. Posteriormente, en 1.912 introdujo, con una complicada, pero primitiva técnica, la iluminación eléctrica, en el interior.

Las cuevas del Hams tienen diferentes áreas que reciben sus nombres según las formas de las estalactitas y estalagmitas, que crecen muy lentamente, solo un centímetro cada 30 años.

En la sala llamada "Sueño del Ángel", se pueden ver las formas mas delicadas y bonitas de las cuevas, donde se admiran las estalactitas excentricas o helictitas, que dan sus nombre a las cuevas, ya que "hams" quiere decir anzuelo, en mallorquín.

Las cuevas se formaron en la Era Terciaria. Tienen también, como las Cuevas del Drach, un lago interior llamado "Mar de Venecia", donde se produce un espectáculo-concierto de luz y sonido.

Otra atracción durante la visita, es el aprovechamiento de las formaciones de la cueva, combinado con la tecnología digital, que hace parecer todo aquello un paseo por el mundo encantado de los cuentos, de los cuales parecen escenarios teatrales, proyectados sobre la piedra milenaria de la cueva.

Son bastante distintas de las otras cuevas, las Cuevas del Drach, que habíamos visitado por la mañana, con espacios visible mas pequeños, pero muy preparados.

Encantados con esta última visita, salimos al exterior donde el sol ya estaba bajo, y enfilamos el regreso a nuestra base.

Por designio de la organización paramos en otra gran tienda de productos variados, tanto objetos de regalo manufacturados, como de alimentos y bebidas típicas de Mallorca, para la compra por los turistas. Esta última parada no me pareció de ningún interés.

Llegamos al hotel, donde cenamos y encargamos una ensaimada mallorquina, para traer de recuerdo a uno de mis hijos, gran degustador de dulces.

El viaje había terminado. Al día siguiente salíamos a primera hora para coger el avión de regreso.

Pudimos ver que el tiempo había cambiado y se preparaban unos días de frío y lluvia, lo que nos hizo alegrarnos, una vez mas, de la suerte climatológica que nos había acompañado toda la semana,

viernes, 26 de agosto de 2011

Mallorca. Monasterio de LLuch

Para la visita al Santuario de Lluch el tiempo se mostró gris y neblinoso.

Hubiera podido ser mejor, como los demás días, pero, dado que era el mes de enero, también podía haber sido peor. Al menos no llovió.

El guía que tuvimos parecía uno de los clientes, pues tenía edad para jubilarse. Sin embargo acumulaba mucha energía todavía.

Había llegado tarde a la cita habitual de las 9 de la mañana, al haber cogido un monumental atasco de tráfico, por las protestas de los trabajadores del nuevo hospital de Palma, recién inaugurado, a los cuales querían cobrar por el aparcamiento, en el cual no tenían mas remedio que estacionar sus vehículos.

La edificación de un nuevo hospital, aunque ya hubiera uno viable y en buenas condiciones, ha sido idea común de todos los "reyezuelos de las taifas autonómicas". De qué hacer un buen pelotazo.

El autobús se dirigió hacia el centro de la isla; esta vez no paramos en Inca, pero si en otro pueblo mas serrano, Selva, ya en la Tramontana, donde había una enorme tienda de artículos de cuero, calzado, chaquetas y chaquetones, bolsos, monederos etc. en fase de liquidación. Aunque la tienda estaba puesta para la venta al público, y el gran taller contiguo tenía aún toda la maquinaria en sus mesas y parecía esperar solamente a los operarios, en la fachada había varios letreros de Se Vende.Estuvimos allí un buen rato, mientras algunos compañeros de viaje compraban de nuevo.

El pueblo serrano tenía una bonita estampa.

Seguimos luego hacia el norte de la Sierra de Tramontana, por entre escarpados montes, con terrazas de los antiguos cultivos, hoy día abandonados y laderas arboladas.

A una altura de 500 m sobre el nivel del mar, se encuentra el Santuario que domina una cuenca natural, rodeada de majestuosos picos.

Vimos circulando esforzadamente en su bicicleta, grupos de ciclistas, dos, tres, a veces mas, seguramentre pertenencientes a algún equipo europeo de los que van a entrenar a Mallorca, para las futuras competiciones de la primavera y el verano, pues en sus países hay mucha nieve, hielo y frío, en esa época del año.

Tras espectaculares vistas, subidas y bajadas, siempre acompañados del grisaceo tiempo, llegamos al Monasterio de Lluch.

El Santuario de Santa María de Lluch, nombre que proviene del latín, -lucus-, que quiere decir "bosque sagrado", se encuentra en el termino municipal de Escorca.

Fue un lugar sagrado desde la prehistoria, rodeado, luego, de leyendas, como la de la imagen de la Virgen hallada en un roquedal, al lado de un torrente, que pasa en la actualidad por detrás del santuario, por un pastor y un monje, que la trasladaron a la sede parroquial de Escorca.

Al ir a venerarla al día siguiente, los habitantes del pueblo, vieron que había desaparecido y la encontraron de nuevo cerca del torrente, en el mismo lugar en que había aparecido la primera vez. Esto sucedió dos veces mas, hasta que los lugareños comprendieron donde quería tener su residencia la Virgen y contruyeron allí un pequeño oratorio.

El lugar rodeado de rocas, bosques y cuevas, tiene un yacimiento prehistórico que data del s. IV a.C., que muestra los remotos orígenes de la ocupación por el hombre de estos parajes; hay también un monumento megalítico; todo indica que fue considerado un lugar sagrado desde los comienzos de su ocupación.

Corría el año 1.268 cuando se edifico la primera capilla.

El actual monasterio data del s. XVII.

El imponente edifico de estilo barroco, y gran austeridad, fue remodelado durante los s.s.XVIII y XIX.

Durante una de las remodelaciones se construyo el albergue de peregrinos, en el que se pueden pasar algunos días, por poco dinero, si se quiere disfrutar de la tranquilidad y la belleza de la zona.

La iglesia de estilo barroco-renacentista, tiene mucho interés cultural, pues, además de otros tesoros, en sus muros se han conservado alrededor de mil pergaminos y millares de documentos de otras épocas, empezando en el s. XIII, disponibles para su investigación.

También hay en Lluch una escolanía, llamada Els blauets, por el color de las ropas que visten, de las mas antiguas y prestigiosas de Europa.

Tuvimos ocasión de verlos y oírlos cantar varias piezas, ya que se hizo coincidir nuestra visita con una de las dos horas en se producen en la iglesia, gustandonos mucho sus cánticos entre los cuales la Salve ante la imagen de la Virgen es la mas popular.

Desde el monasterio se inician varias rutas de senderismo por aquellos bellos parajes.

El monasterio de Lluch es el centro espiritual de Mallorca, por la veneración que se le tiene a la Virgen, patrona de la isla, llamada La Moreneta.

Varias peregrinaciones, con mucha asistencia, se organizan a lo largo del año.

Antes de entrar a visitar la basílica, y de oír a Els Blauets, pasamos un rato muy entretenido en el pequeño museo, que aunque de dimensiones reducidas es muy interesante; hay objetos procedentes del yacimiento arqueológico, como los utensilios que se usaron en las edades prehistóricas, joyas donadas a la Virgen por particulares y personalidades, trajes regionales,

cerámicas, pinturas y muchas otras cosas, muy bien expuestas.

La iglesia estaba llena, pues todo el mundo, que visita el santuario, está advertido y quiere oír a los niños cantores.

Estos niños viven en el Colegio que tiene allí la Orden de los Padres de los Sagrados Corazones, donde siguen los mismos estudios, que el resto de los niños del país.

Pudimos ver la imagen de Nuestra Señora de Lluch, una talla medieval del s. XIV, realizada en piedra, venerada no solo en Lluch, sino en toda la isla.

Luego tuvimos tiempo de pasear por el recinto de la iglesia; el patio o plaza, ya que es bien grande, delante de la iglesia, presidida por la estatua del obispo Campins, estatua que está de rodillas mirando la fachada principal de la iglesia, que data de 1.920.

El obispo Campins fue un gran devoto de esta advocación de la virgen

Nos llegamos hasta la zona de la hospedería, y por fin acabamos tomando un café en un bar de la zona.

Volvimos al Hotel, donde comimos bastante mejor que en los diferentes lugares donde nos habían llevado las excursiones.

Por la tarde paseamos por la magnifica avenida delante del mar, hasta ver de nuevo la espectacular puesta de sol en el mar Mediterraneo.

martes, 16 de agosto de 2011

Mallorca. La capital: Palma de Mallorca

Salimos de buena hora hacia Palma de Mallorca.

Hoy íbamos a dedicar el día a conocer esta ciudad, deseado destino turístico nacional e internacional.

El sol brillaba y se esperaba un buen día, como todos los que tuvimos la suerte de disfrutar, durante nuestra estancia en la isla.

Como ya he comentado, nuestra base en Can Pastilla, está muy cerca de Palma de Mallorca; esta localidad se encuentra en la misma bahía de Palma.

Llegamos, pues en poco tiempo, y nos dejaron al lado del puerto deportivo, frente al impresionante conjunto que forman la Catedral, el palacio de la Almudaima y el palacio episcopal.

Antes de hacer nuestro recorrido, conozcamos un poco de la geografía e historia de esta perla del Mediterraneo.

Palma de Mallorca está situada al oeste de una extensa bahía de su mismo nombre, de manera que es visible, en la distancia, desde los diversos pueblos, con magnifica playa, de la misma bahía, como nuestra base, Can Pastilla.

La Sierra de Tramontana y la llanura del Pla, son sus otros limites.

Es una ciudad de mas de 400.000 habitantes, cifra que se ha duplicado en los últimos 30 años, y ha hecho desarrollarse un urbanismo un tanto salvaje, no siempre acorde con el orden y la belleza. De hecho me sorprendió bastante, el tremendo contraste entre la parte antigua y el desarrollo decimonónico, y la actual, con los barrios contiguos, que son francamente feos. Es el tributo a pagar, parece ser, por un desarrollo tan grande y tan rápido.

Fue el cónsul romano Quinto Cecilio Metelo Baleárico, conquistador del archipiélago para Roma, el que fundo la ciudad con el nombre de Palma, en 123 a.C. Parece que las ruinas romanas pueden estar bajo el casco histórico, aunque es difícil determinarlo con exactitud, al estar la ciudad construida encima.

A la caída del Imperio Romano, el pueblo germánico de los vándalos, invadió la isla. La siguiente invasión fue la de los musulmanes, que permanecieron mas de tres siglos en Mallorca, hasta la conquista de la misma por Jaime I en 1.229, que la convirtió en un próspero enclave, capital de su propio reino.

Este reino, que duro cincuenta años, fue incorporado posteriormente a la corona de Aragón. Durante esos cincuenta años fue llamada Ciudad de Mallorca, recuperando su antiguo topónimo romano de Palma de Mallorca, en el s. XVIII, por el que es conocida en todo el mundo.

A principios del s. XVI la Guerra de las Germanías y los frecuentes ataques de los piratas berberiscos y turcos, provocaron la disminución del comercio; estos ataques, junto con los gastos para dotarla de fortificaciones, llevaron a su decadencia, que duro cerca de dos siglos.

Finalmente la ocupación de Argelia por Francia, en el s. XIX, acabo con la piratería berberisca.

Durante la Edad Media, su situación geográfica hizo que tuviera un intenso comercio con las Señorías italianas, el norte de África y el Imperio Otomano, que le propiciaron una edad de oro, con la Lonja como centro de contratación.

Actualmente los dos principales motores económicos de la ciudad son el turismo y la construcción, que han relegado a un segundo plano otras fuentes de riqueza anteriores, como fueron la agricultura y la industria.

Los inicios de turismo se remontan a comienzos del s. XX, aunque fue a partir de los años 60 y 70 cuando se produjo lo que se ha dado en llamar el boom turístico de sol y playa, propiciado por la gran cantidad de playas de la isla y su suave clima mediterraneo.

Con el tiempo diversas industrias relacionadas con el turismo han adquirido gran desarrollo, de manera que han traspasado las fronteras insulares y están implantadas en otros lugares de España, como cadenas hoteleras, agencias de viajes y otros servicios relacionados.

Después de llegar al aparcamiento, desde el cual ya teníamos la primera y espectacular vista del complejo Catedral-Palacio de la Almudaima-Palacio Episcopal, que se reflejan en la aguas artificiales del lago del Parque del Mar por un lado, y el puerto deportivo por el otro, comenzamos a conocer la ciudad subiendo hasta el Ayuntamiento, en la plaza de las Cortes.

En la zona de la derecha subiendo, estuvo situado una de los mayores conjuntos medievales de Palma, el convento de Santo Domingo, que ocupo el extenso solar donde hoy se encuentran el Palacio March, el Circulo Mallorquín, hoy sede del parlamento autonómico, y el resto de edificios porticados.

Entre los edificios del conjunto conventual, que se empezó a construir en el s. XIII, destacaban la iglesia gótica, sus dos claustros, y la sala capitular, todo ello lleno de riquezas arquitectónicas, artísticas, y joyas de todo tipo.

Con la aparición del liberalismo y el comienzo de las leyes desamortizadoras, el convento estaba en el punto de mira de su privatización. Después de diversos avatares y a pesar de las enérgicas protestas de la Sociedad Económica de Amigos del País, el convento fue subastado, y su demolición empezó en 1837, quedando durante muchos años sin completar, pero en avanzado estado de ruina. Hoy día la zona esta restaurada y no quedan vestigios del Convento de Santo Domingo.

Cuando se conocen hechos como este, fruto de la especulación y el fanatismo, y que se pueden lamentar durante siglos, da pena de los seres humanos, y su cortedad de miras.

Llegamos a la Plaza de las Cortes donde pudimos ver el Ayuntamiento de la ciudad, en obras del alero en ese momento, que nos impidieron apreciarlo debidamente.

Pongo una foto, con alero incluido para que se vea lo bonito que es.

La construccion del edificio empezó a mediados del s. XVII y duro un siglo. Reproduce el modelo de casa señorial mallorquina de tres pisos. En la parte superior de la fachada hay un reloj, conocido popularmente como En Figuera.

En el costado derecho del Ayuntamiento esta la sede del Consell de Mallorca, empezado a construir en el año 1.882, una de las mejores realizaciones del estilo neogótico.

Discurrimos un rato por las estrechas y tortuosas calles del centro histórico que rodean la catedral, donde vivía antaño la nobleza mallorquina y en las cuales quedan palacios, iglesias y conventos de aquella época.

Llegamos a la gran catedral.

Antiguamente el mar llegaba hasta los pies de la muralla, mientras que ahora está el Parque del Mar y una carretera que pasa por delante del conjunto.

La Catedral de Mallorca dedicada a la Asunción de la Virgen María fue declarada Monumento Histórico-Artístico en 1.931. Es un gran templo gótico, que se asoma al mar sobre las murallas góticas y renacentistas, que en otro tiempo defendieron la ciudad, de invasores y piratas. Ella misma tiene, dentro de su belleza, aspecto de fortificación,

Fue comenzada en el 1.229, al poco tiempo de la conquista, por el rey Jaime I, y consagrada, casi un siglo y medio después, en 1.346 por Jaime III, aunque los trabajos prosiguieron hasta comienzos del s. XVII, y, en rigor, se siguió y se sigue reformando y restaurando cada poco tiempo.

Es conocida la restauración que efectuó a comienzos del s. XX el arquitecto Antonio Gaudi, que duro diez años, por encargo del obispo Campins, para dotarla de mas luz, ya que era oscura, y de algunos elementos modernizadores. En la reforma desaparecieron espacios anteriores, como el Pasillo de los cirios, de estilo mudéjar, y la mitad del coro.

La última aportación es actual y ha corrido por encargo a Miquel Barcelo, artista mallorquín de fama internacional, que entre 2.001 y 2.006, redecoro las paredes, las vidrieras y el mobiliario, de la capilla de San Pedro.

La catedral tiene muchos elementos destacables. Además de las reformas modernistas y recientes, tiene el rosetón mas grande del mundo en su estilo.

En la nave mayor, en la capilla de la Trinidad descansan los restos de los reyes Jaime II y Jaime III.

Las naves están divididas por altísimos pilares octogonales, que ascienden hasta recoger los nervios de las bóvedas de crucería, formando un efecto soberbio. Hay capillas y retablos flamencos renacentistas muy bonitos e interesantes.

Contrasta el aspecto externo con sus contrafuertes arbotantes y pináculos y el diáfano interior, donde se filtra la luz por las vidrieras en mil colores.

En el exterior, tanto la puerta del Mirador decorada con esculturas de Sagrera, y, decoración de motivos vegetales de gran belleza, como la Puerta Mayor apoyada en cuatro majestuosas columnas son dos autenticas joyas.

Estuvimos un buen rato conociendo la catedral; tengo que decir que no me gustaron demasiado las innovaciones, aunque en cambio a mi marido le entusiasmaron. No logro comprender el arte de Barceló. En cuanto a la reforma de Guadi, me llamo la atención el púlpito reformado para que las palabras del oficiante llegaran a todo el recinto.

El Museo Catedralicio, por el cual pasamos, tiene autenticas joyas en objetos litúrgicos, cuadros, esculturas...

Nuestra siguiente visita fue al contiguo el Palacio de la Almudaima, que forma parte del conjunto.

El castillo actual, de origen romano, fue utilizado como alcázar por los musulmanes y modificado después de la conquista por Jaime II, hijo y sucesor de Jaime I el Conquistador, Sancho I y Jaime III.

Durante los primeros años de s. XVI, le fue añadido un piso por orden de Carlos I.

Hoy día pertenece al Patrimonio Nacional y es la residencia oficial de verano del rey de España, Juan Carlos I, si bien reside, con el resto de la familia real, en el palacio de Marivent.

Posee una solida muralla visible todavía y en su interior surge un edificio rectangular con cinco torres almenadas

Fue transformado en palacio real por Jaime II, añadiendo salas, habitaciones, patios, y capillas, para convertirla en un espacio mas lujoso y cómodo.

En el año 1.963 se iniciaron obras de restauración del palacio, que hoy día alberga, además de su función institucional como residencia oficial del rey, la Capitanía General de Baleares y un museo.

Sus estancias están adornadas con muebles, armaduras, estandartes..., y sobre todo con magníficos tapices flamencos de los s.s. XVI y XVII, y españoles del XVII y XVIII, con motivos mitológicos e históricos.

Me gusto mucho un cuadro que representa la batalla de Lepanto, cuando las escuadras aliadas de España y de Venecia, derrotaron en el año 1.571 a los turcos, frenando su expansión y la conquista de Europa.

Los despachos del rey y de la reina, que tiene las mejores vistas de la bahía de Palma; están preparados como si fueran a ser utilizados inmediatamente.

Desde el exterior se pude admirar la fachada que mira al mar, con la preciosa galería y la torre del homenaje coronada por la estatua del arcángel san Gabriel.

Al bajar nos detuvimos un momento en el Patio de Armas, donde hay una linda fuente con un león.

Salimos hacia la catedral de nuevo para llegar al Palacio Episcopal, que es el tercer elemento del conjunto.

El Palacio Episcopal es un obra de gran superficie, cuyo núcleo original se comenzo a construir en el s. XIII, y que como es de suponer, ha tenido muchas modificaciones. La primitiva construccion fue ampliada notablemente en los s.s. XVII y XVIII.

Tiene una importante fachada principal, de estilo manierista;


en su interior hay patios y jardines, además del Museo Diocesano, recientemente restaurado, con muchas obras de arte; cuando pasamos por allí estaba ya cerrado; llevábamos tanto visto durante toda la mañana, que casi fue bueno no poder entrar.

Teníamos tiempo libre antes de ir a comer. Me fui a pasear por los alrededores, por una rambla muy bonita cercana al mar. Hay en ella palacios, restos de una antigua iglesia gótica restaurada, edificios institucionales, por un lado y el puerto y el puerto deportivo, por el otro.


Después de este corto paseo que disfrute mucho, fuimos a comer.

El lugar elegido por la organización, no tenia ningún interés, la comida tampoco.

El restaurante estaba en un antiguo aeroclub perteneciente al Ejercito del Aire, hoy día dedicado a eventos y banquetes; paso lo mismo que en Can Picafort, durante la excursión a Formentor y Alcudia: fuimos amenizados por una animadora que cantaba tonadas de verbena popular.

Tras la comida fuimos a otro de los lugares emblemáticos de Palma, el castillo de Bellver.

El Castillo de estilo gótico, construido en el s. XIV, por orden del rey Jaime II, se encuentra a 3 km de la ciudad, sobre un monte, a 112 m sobre el nivel del mar, en una zona boscosa, desde el que se puede contemplar la ciudad, el puerto, la Sierra de Tramontana y el Pla, o llanura central, vista que pudimos disfrutar desde lo mas alto del castillo.

Ya su nombre -Bella Vista- lo dice.


Tiene la particularidad de ser uno de los pocos castillos de Europa de planta circular, inspirado, quizás, en el Herodión de Cisjordania, construido por Herodes El Grande, entre 23-20 a.C.

Es un castillo con grandes fortificaciones, que fueron modificadas a lo largo de los siglos, p.e., cuando la artilleria hizo inútiles las almenas, que fueron eliminadas.

Fue empleado como residencia, por su constructor Jaime II, por Sancho I y Jaime III reyes de Mallorca, y mas tarde, cuando el reino de Mallorca fue absorbido por la corona de Aragón, por algunos reyes de Aragón.

Tuvo también huéspedes involuntarios, como los prisioneros, entre los cuales cabe destacar en el s. XIV la reina Violante, segunda esposa de Jaime III, así como los hijos de este rey, Jaime e Isabel.

Durante la guerra de la Independencia fueron encarcelados en el castillo presos que provenian de la batalla de Bailen.

Y posteriormente llegaron allí presos políticos, entre los cuales el mas ilustre fue el ministro Gaspar Melchor de Jovellanos,
por orden de Godoy, que lo mando detenido a Mallorca. 

Estuvo en el castillo seis años (1.802-1.806); a él se debe la primera descripción del castillo, del cual encargo los primeros planos y dibujos, así como la descripción botánica y geológica del pinar circundante.

Desde 1.976 alberga el Museo de Historia de Palma de Mallorca, cuyo mas importante deposito es la colección de escultura clásica, con algunas magnificas piezas, del Cardenal Despuig, que había residido mucho tiempo en Italia.

En el patio se desarrollan gran cantidad de actos protocolarios, conciertos y otras actividades culturales.
Visitamos el museo en el cual además de la colección Despuig, hay una sala con alusiones a Jovellanos, que es donde se supone que vivió durante su estancia en el Castillo.

Contemplamos el magnifico patio, prueba del exquisito gusto de los reyes de Mallorca,


y subimos hasta el piso mas alto para disfrutar de la vista panorámica.

El guía nos indico donde estaba el palacio de Marivent, la residencia de hecho, de la familia real, al lado del mar y entre pinares.


La visita al Castillo de Bellver y la panorámica de Palma de Mallorca fue un bonito y digno final para un día denso e interesante.

Ahora ya sabíamos porque se llama a Palma de Mallorca "Perla del Mediterraneo".